Las Burgas: fuentes y restos arqueológicos

Declarado Bien de Interés Cultural en 2007, el manantial de As Burgas está ligado a los orígenes de la ciudad. Un acuífero de 1km de profundidad del que emana agua a una temperatura superior a 60ºC, a la que los romanos bautizaron como “Aquis Auriensis” (Agua de Oro). 

As Burgas 

Este asentamiento termal está dividido en 3 espacios: 

• Burga de Abaixo: fuente de estilo neoclásico coronada con el escudo de la ciudad y pila central. Su autoría se atribuye a al maestro Trillo (S. XIX). Junto a ella encontramos “O Fervedoiro” (estanque de agua burbujeante) y, frente a ella, una zona ajardinada donde se ubicaron los primeros jardines públicos de la ciudad en la época romana. 
• Piscina Termal: ubicada en la explanada central y al aire libre; es uno de los emblemas de la Ciudad. 
• Burga de Arriba: es la fuente más antigua (S. XVII). Junto a ella yacen cuatro réplicas de piedras votivas dedicadas a deidades de estas aguas terapéuticas. Lugar erigido como centro de peregrinaciones y como centro del comercio artesanal de la ciudad al emplear el calor natural que emana de las aguas para suplir al carbón y la leña como método de obtención de energía. 

Piscina de as Burgas

La piscina termal de As Burgas es uno de los emblemas de la ciudad. Una piscina al aire libre que se nutre de las aguas termales del acuífero de As Burgas. Pese a que, en la veta original, el agua brota a unos 60ºC, esta se enfría hasta los 38-40ºC para permitir una perfecta experiencia de baño, similar a la que vivieron los primeros pobladores romanos de Ourense. Las aguas son hipertermales de mineralización media, fluorada con iones de bicarbonato y sodio (muy blandas) y un PH de 7.7. Además, también existe la posibilidad de disfrutar de sauna húmeda en las propias instalaciones y tumbarse al sol para completar la experiencia.