Fundado en el S. XIV, el Claustro de San Francisco sustituyó, por mandato del Papa Clemente V, al primer asentamiento franciscano de la ciudad de Ourense; destruido en el año 1292 a raíz de conflictos entre el Obispo y el Concello.
En 1951 fue declarado Monumento Histórico-Artístico. Dos años más tarde, en 1953, tras la marcha de la orden franciscana, el convento se transformó en cuartel de infantería para el Regimiento Zamora nº8 hasta 1984.
La construcción presenta una planta cuadrada de estilo gótico y fuerte tradición románica, declarada Monumento Nacional en 1926. Destacan los capiteles de sus 63 arcos decorados con motivos vegetales, animales, mitológicos y humanos.
De forma anexa, en el lado sur de la antigua iglesia, encontramos la Capilla de la Venerable orden Tercera. Este emplazamiento acoge a día de hoy el Museo Arqueológico Provincial.
Detrás del conjunto conventual, se encuentra el Cementerio de San Francisco, declarado Bien de Interés Cultural en el año 2000 y en el que descansan algunos de los más grandes nombres de la cultura gallega como Eduardo Blanco Amor, Ramón Otero Pedrayo o Vicente Risco; entre otros.
En el corredor norte se encuentra la Sala Capitular, convertida en Capilla Funeraria por la familia Sandoval en el S. XVI. El acceso a esta misma se realiza a través de un arco renacentista flanqueado por las representaciones de la Virgen de la Anunciación y del Arcángel San Miguel.
En los últimos años, este complejo se ha convertido en un importante centro cultural para la ciudad. En esta ubicación se encuentra el Auditorio Municipal de Ourense, obra del arquitecto José Manuel Casabella e inaugurado en 2005 y, desde 2019, la Biblioteca Nodal de Ourense junto con el Archivo Provincial.
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